
Quiero tenerlo dice mi cuerpo y lo conozco dicen
mis recuerdo, si es aquel que jugaba contigo al papa y a la mama, era el mismo que me dio ese cálido beso bajo el árbol con nieve en aquel invierno frio y lejos de casa.
-BOOOOOOOOM-
Comienzan los gritos y yo me pongo fría, del miedo me caigo de la mesa y me golpeo fuertemente la cabeza, veo como sangra mi cabeza y mi abdomen. Trato de incorporarme con dolor en mi misma, pero sé que lo último grato que veré es un arma en la mano del hombre que en algún momento, mi ya inerte cuerpo deseó.